LAS HORAS
IV
La luna da claridad
Humana ya al horizonte,
Y la claridad reúne
Torres, sierras, nubarrones.
Se abandona el desvelado.
Firme el borde
Nocturno. La inmensidad
Es un bloque.
En torno velando el cielo
Atiende, ciñe a la noche.
De la raíz a la hoja
Se yergue velando el bosque.
Fiel, a oscuras
Va el mundo con el insomne.
El reloj
Da las cuatro. Firmes golpes.
Todo lo ciñe el sosiego.
Horas suenan. Son del hombre.
Las soledades humanas
Palpitan y se responden.
Para leer el poema completo, sigue la etiqueta Sobre Cántico y encontrarás us tres primeras partes.
1 comentario:
Hola Profe!
que pasa, todo bien :)
saludes y feliz año!
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