¡Actualidad! Tan fugaz/ En su cogollo y su miga,/ Regala a mi lentitud/ El sumo sabor a vida. Jorge Guillén
lunes, 19 de septiembre de 2011
Algunos poemas de 'Poetrastos' (5)
reset
(José Luis Zúñiga)
Todo era triste entonces, eso lo supe luego.
Íbamos al colegio con aquellos
pantalones tan cortos. En el patio, el recreo
era un parque temático pero sin luz eléctrica.
Bailábamos peonzas, jugábamos al clavo,
siempre al fútbol con balones de trapo.
Llovía sin parar, todos los días,
una lluvia tenaz, torpe, liviana, que empapaba la ropa,
los chalecos de lana que mi madre tejía.
Todo era triste entonces, pero yo lo ignoraba,
yo era un niño feliz a pesar de los curas.
Era normal que cada invierno dieran la vuelta a los abrigos,
y cada primavera una modista gorda cambiara a las camisas
los cuellos y los puños. Los amigos
—ya nos vamos muriendo— eran algo intocable.
Todo era triste entonces, eso lo supe luego.
Todo era triste entonces y sigue siendo triste,
lo malo es que ahora sé lo que antes no sabía
y siento un malestar tripas adentro
cuando pienso en los días felices de mi infancia.
No puedo ser feliz. No quiero
haber sido feliz. Sigue lloviendo
y ahora el agua me cala hasta los huesos.
No tengo en la cabeza más que muertes
de efectos especiales. Muchas veces
me despierto en la noche envuelto en nieblas
de traición o de olvido. Me tomo dos pastillas
y me vuelvo a dormir; y me regreso
al patio del colegio, allí están todos.
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3 comentarios:
Quiero jugar a la peonza contido.
Un saludo.
Conociste a Zuñiga? También eres una afortunada... como yo, que lo conocí de refilón pero me bastó y sobró.... Me identifico mucho con este poema, menos con la lluvia y las pastillas.
:)
Apenas le conocí. Cruzamos algunos saludos por los lugares de Madrid, pero ambos sabíamos lo que hacía cada cual. Un gran tipo, Zúñiga.
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