jueves, 9 de mayo de 2013

"Cantos de Amor" de Ausias March, en traducción de Jorge de Montemayor

CANTO I
Qui no és trist de mos dictats no cur

   No cure de mis versos, ni los lea
quien no fuere muy triste, o lo aya sido;
y quien lo es, para que más lo sea
lugar no pida escuro, ni escondido.
Mis dichos puede oýr, y en ellos vea
cómo sin arte alguna me han salido
del alma, y la razón de mi querella
muy bien la sabe Amor qu'es causa d'ella.
Alguna parte (y mucha) he yo hallado
de gran deleyte al triste pensamiento;
si alguno de dolor me vio cercado,
mi alma acompañó muy gran contento:
en quanto un simple amor m'á conversado,
no creo que hay más bien, ni aun yo lo siento,
y si con atención se mira y siente,
deléytame el dolor mezcladamente.
   Muy presto haré vida d'ermitaño
por más honrrar de Amor su grande fiesta,
y a nadie duela mi bivir estraño,
que amor me cita, emplaza, y amonesta.
Yo le amo por sí solo, y no m'engaño:
si el bien me da que puede, ¿qué le resta?;
que si a dexar su mal me determino,
será bivir más triste de contino.
   Jamás pudo negar mi entendimiento
que sus tristezas son mejor partido
que otr'alegría qualquiera, ni contento,
pues trae allá su mal un bien cumplido;
y parte del que a causa suya siento
es el que a qualquier triste es concedido,
que más si él mismo llora se consuela,
que todo el mundo llore, y dél se duela.
   De mil gentes seré reprehendido
porque la vida triste alabo y quiero;
mas yo que vi su gloria no he querido
huyr d'un mal do tanto bien espero:
sin esperiencia nadie havrá sabido
el bien que da un querer puro y syncero,
y haviéndose desta arte con su Dama
él mismo se ama a sí en ver que ama.
   Amor os dé a entender, señora mía,
que a todo estremo soy por vos llegado:
con sólo mi poder me ha derribado,
el suyo s'escusó con mi porfía.

No hay comentarios: