Áspera cicatriz
3
Buenos días
teléfonos escritorios pinturas
Qué alegre estoy
Puede medirse mi alegría por centímetros cuadrados
puede abarcar kilómetros kilos de azúcar
El hombre sin piernas entra a la oficina
¡Buenos días pedazo de hombre!
¿Qué hace usted a estas horas con su tripa en ayunas?
Yo contesto una carta Buenos Aires o Londres
Veo por la ventana estremecimientos de ferrocarriles
(¿Cómo hacer que el mar participe de todo esto?
¿Cómo traerlo hasta aquí
enseñarle obediencia
compararlo vestirlo
darle nuevo azogue fértiles aserraderos?)
¿Y por qué aserraderos?
¡Un timbrazo acelera la sal de mis ideas!
Buenos días señor
buenos días señora....
4
¡El mar! ¡El mar! ¡El mar!
La idea del mar sus fuegos sus cometas
en las estancias de mi sangre
revolviendo mis cobijas
mis libros
interponiéndose entre mis amigos y los radios
en mis costumbres
Sube a los día con mis propias piernas
encima encima
de mi ánimo de mis montañas
Transformando mis viajes mis espadas
Si estoy cansado me levanta de la silla
me rescata del sueño me incendia me deshace
Florece en los vasos en los jardines
Hincha la noche profundiza su vientre
No me deja escribir anudado en mi lengua
revuelto en mi cerebro
¡El mar! ¡El mar! ¡El mar!
6
No está en ninguna parte
Cuando regresé de la oficina busqué su sombra
levanté un cuaderno
arrimé una silla a la mesa
y me puse a trazar su geometría
Tomé un vaso de agua y me sorprendió su dulzura
Busqué en mi traje en las gavetas de mi escritorio
Cansado sentí deseos de mujer pero no salí a la calle
Releí viejas cartas me puse a atar lazos con mi saliva
a construir amores perdidos con mis cabellos
habitaciones y amigos que un día conocí en mi frente
Pero sentía su presencia como un acoso
su lujuria dentro de mi estómago
(Tal vez en el jardín desenterraba plantas y buscaba hormigas
para la poderosa baba de su lengua entumecida como
escorpión)
7
Mientras tomo una taza de café repaso los poemas
que he escrito
¡Cuánta confusión! ¡Cuántas palabras perdidas!
¿Bajo qué impulso lancé mi pecho mis descomposturas
a la búsqueda de ese mar que no es claro ni habitable?
Si he dicho soledad árbol o cieno
fueron palabras imprecisas para extender mis brazos
para darle un vuelco al reloj y mostrar su desnudez
y sus caminos
He tomado conciencia de mis obligaciones
y he querido dar a los hombres nada más un relámpago
Debajo de una imagen ahora me duermo
ahora la doblo ahora la subrayo
Mañana despertaré en un mundo nuevo
No hay comentarios:
Publicar un comentario